• Entre enero y noviembre de 2012, el Servicio
Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria revisó más de tres
millones de equipajes, 162 mil 285 aviones, 11 mil 272 barcos y 139 mil 872
ferrocarriles con mercancías agropecuarias; destruyó 803 mil 472 kilos de
mercancías que fueron retenidas.
El Servicio Nacional Sanidad, Inocuidad y Calidad
Agroalimentaria (SENASICA) informó que, hasta el 30 de noviembre del presente
año, ha rechazado tres mil 487 embarques comerciales en los que detectó 30
plagas de importancia cuarentenaria que significaban un riesgo para el
patrimonio agroalimentario del país.
Entre enero y noviembre de 2012, el órgano desconcentrado de
la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación
(SAGARPA) revisó más de tres millones de equipajes, 162 mil 285 aviones
comerciales y privados, 11 mil 272 barcos comerciales, cruceros y yates, y 139
mil 872 ferrocarriles con mercancías agropecuarias.
Producto de estas revisiones, explicó el SENASICA, destruyó
803 mil 472 kilos de mercancías que fueron retenidas, 317 mil 785 en barcos y
485 mil 687 kilos producto de la revisión de aviones.
Entre los productos de origen vegetal que con mayor frecuencia
se rechazan se encuentran: alpiste, manzana, papa, durazno, harina de trigo,
cebolla, cacahuate y uva, mientras que los productos de origen animal más
rechazados son: pechuga de pollo, cortes de ovino, carne de cerdo y de ave,
canales de porcino y equinos para sacrificio, así como despojos y pieles de
cerdo.
Con objeto de conservar y mejorar el estatus
fitozoosanitario del país, la SAGARPA cuenta con un mecanismo de revisión de
las mercancías que ingresan de manera comercial o turística, a través del cual
se detectan las mercancías que implican un riesgo y se evita su entrada.
Para ello, el SENASICA cuenta con oficinas de inspección de
sanidad agropecuaria en todos los puntos de entrada al país (puertos, fronteras
y aeropuertos), en donde los oficiales revisan los productos agroalimentarios
que se pretende introducir al país y rechazan aquellos que no cumplen con la
normatividad de sanidad e inocuidad vigente, por la presencia de plagas de
interés cuarentenario y económico para México.
También, los que tienen defectos críticos que ponen en duda
la condición sanitaria de las mercancías, o que presentan irregularidades en la
certificación, evasión y alteración de documentos, entre otras causas.
A través de estas labores de inspección fitozoosanitaria se
interceptaron productos que contenían plagas cuya entrada hubiesen generado
pérdidas económicas a los productores nacionales, concluyó el órgano
dependiente de la SAGARPA.