• En conferencia de
prensa, el director general de la FAO, José Graziano da Silva, reconoció que
México es la nación que mayor impacto ha tenido en el impulso de las
comunidades rurales, mediante la operación del PESA, lo que representa una
referencia para ser aplicado en otros países.
• El PROCAMPO, que
tienen una fuerte demanda económica y social, tendrá una cirugía mayor para que
cumpla el propósito principal de estimular e incentivar la producción agrícola
en el país, con la colaboración de organismos como la FAO: EMM.
Un gobierno comprometido con las
causas sociales, disponibilidad de recursos y leyes e instituciones para el
diseño y ejecución de políticas públicas que incentiven la producción primaria
en zonas de alta y muy alta marginación, son garantía para que la Cruzada
Nacional Contra el Hambre del gobierno de México logre el propósito de
erradicar la pobreza alimentaria en el país.
Así lo aseguró el director
general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO), José Graziano da Silva, quien manifestó que México está en
esa ruta y es la nación que mayor impacto ha tenido en el impulso de las
comunidades rurales, mediante la operación del Proyecto Estratégico de
Seguridad Alimentaria (PESA), el cual representa una referencia para ser
aplicado en otras naciones.
En conferencia de prensa, el
directivo de la FAO subrayó que el éxito de este programa se finca en su
redireccionamiento hacia la Cruzada Nacional Contra el Hambre, toda vez que el
Gobierno de la República lo hizo suyo y le destina una mayor inversión pública.
Al respecto, el secretario de
Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Enrique
Martínez y Martínez, afirmó que con el propósito de garantizar la seguridad
alimentaria del país —que es uno de los fines de la Cruzada Nacional contra el
Hambre— ya se trabaja en la reingeniería de los distintos programas y acciones
que se operan, así como en la conformación de un solo Código Agroalimentario
que concentre toda la normativa del sector y evite la sobreregulación y la
laxitud en las leyes.
Acompañado por directivos de la
FAO y funcionarios del Gobierno Federal, el titular de la SAGARPA señaló que
estas medidas se incorporarán en las mesas de trabajo del “Pacto por México
para el Campo”, a afecto concretar y presentar la “gran reforma del campo
mexicano”.
Precisó que, en coordinación con
la FAO, el PESA-SAGARPA tuvo mínimas adecuaciones para insertarse como programa
central en la Cruzada Nacional Contra el Hambre, con resultados tangibles para
el fortalecimiento de la seguridad alimentaria en comunidades marginadas.
Explicó que en el caso del
PROCAMPO, que tiene una fuerte demanda económica y social, habrá una cirugía
mayor para que cumpla con el propósito principal de estimular e incentivar la
producción agrícola en el país, con la opinión de organismos internacionales
como la FAO.
Destacó que algunas de las
principales acciones de esta administración para lograr la transformación del
campo se basan en hacer más productivo el minifundio, iniciar la producción de
fertilizantes, ampliar la tecnificación de riego y contar con semillas
mejoradas.
Además, subrayó que se trabaja en
la conformación de una auténtica banca de desarrollo, con mejores y oportunos
créditos, para que el sector primario tenga mayor presencia en el Producto
Interno Bruto, lo que se traducirá en crecimiento, apoyo y respaldo a los
productores.
Impacto productivo del
PESA-SAGARPA en 300 de los 400 municipios de la Cruzada Nacional Contra el
Hambre
En el evento, que tuvo lugar en
la SAGARPA, la representante de la FAO en México, Nuria Urquía Fernández,
presentó el libro “Panorama de la seguridad alimentaria y nutricional en México
2012”, y afirmó que la estrecha colaboración con la SAGARPA y otras instancias
públicas y privadas permitió esta publicación, que es una fotografía de la
situación de la seguridad alimentaria mexicana.
Destacó que en la presente
administración el tema adquiere la importancia que merece, puesto que forma
parte de la Cruzada Nacional Contra el Hambre que lleva a cabo el Gobierno de
la República y se acompaña de iniciativas legislativas que en breve se
convertirán en ley.
México tiene una situación muy
particular en cuanto a la seguridad alimentaria a nivel nacional, puesto que tiene
una suficiencia de la oferta disponible de alimentos superior a muchos otros
países del mundo, sin embargo aún es tema pendiente garantizar el acceso a
éstos, subrayó Urquía Fernández.
Explicó que de los 400 municipios
de alta y muy alta marginación incluidos en la Cruzada, 300 son motivo de
atención por parte del PESA, a través de la SAGARPA.
Cabe señalar que para estos
ayuntamientos este año se ejercen mil 500 millones de pesos para atender a tres
mil 700 localidades, con 100 mil proyectos de autoconsumo y de generación de
ingresos que producirán excedentes de alimentos de la canasta básica, a través
del desarrollo de capacidades, en beneficio de 100 mil familias,
El PESA-SAGARPA es un modelo de
cooperación interinstitucional que ha sido direccionado para la formación de
capital humano en las zonas marginadas del el sector rural para el desarrollo
de proyectos productivos agropecuarios y acuícolas, así como obras de
conservación y uso sustentable de suelo y agua, a fin de fortalecer la
seguridad alimentaria e incrementar ingresos por la venta de excedentes.
A nivel nacional, en 2013, el
programa maneja un presupuesto de tres mil millones de pesos y está dirigido,
en general, al desarrollo de 200 mil proyectos productivos y 250 obras de
captación de agua y mejoramiento de suelos, en nueve mil localidades rurales de
alta y muy alta marginación del país.
Está programada una cubertura de
mil 50 municipios de 20 entidades federativas, en beneficio de 200 mil
familias, con especial atención para los estados de Chiapas, Oaxaca y Guerrero.
Entre los beneficios del programa
PESA-SAGARPA destacan la construcción de cisternas, tanques de almacenamiento y
ollas de agua, así como la operación de corrales de aves para la producción de
carne y huevo de traspatio.
Además, la cría de ovinos;
cultivo de hortalizas y huertos escolares –acelgas, rábanos, calabazas,
zanahorias, jitomate y col, entre otros-; invernaderos, plantaciones de maíz y
frijol combinados con árboles frutales, y el manejo de especies de pesca, como
la tilapia.