·
El impacto de las reformas promovidas por el Gobierno Federal ya tiene
lugar en el sector agroalimentario respecto al acceso a la educación de la
población rural, mejores servicios en telecomunicaciones y nuevos esquemas de
financiamiento y créditos al campo, entre otros, afirmó el oficial mayor,
Marcos Bucio Mújica.
·
Estas iniciativas del Presidente Enrique Peña Nieto buscan
contrarrestar el problema estructural que origina la falta de crecimiento de
México e índices de pobreza en la población, subrayó.
·
Acompañado por el asesor de la SHCP, Hugo Garduño Arredondo, el
funcionario de la SAGARPA dictó la conferencia magistral “Reformas
Estructurales y su Perspectiva 2015-2018”.
Las reformas estructurales,
promovidas por el Gobierno de la República, están enfocadas en un proceso de
mediano y largo plazos para generar crecimiento económico y social en el país,
así como un andamiaje de instrumentos legales y normativos direccionados a
impulsar la productividad y competitividad en el sector agroalimentario.
Así lo señaló el oficial mayor de
la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y
Alimentación, Marcos Bucio Mújica, quien aseguró que estas iniciativas
del Presidente Enrique Peña Nieto buscan contrarrestar el problema estructural
que origina la falta de crecimiento de México, índices de pobreza en la
población y desigualdad.
Durante su conferencia magistral
“Reformas Estructurales y su Perspectiva 2015-2018”, el funcionario federal
expuso que en esta nueva visión de cambio del país, las Reformas Laboral,
Educativa, Telecomunicaciones y Competitividad Económica, Hacendaria,
Financiera y Energética coadyuvan a liberar el potencial económico de México.
Acompañado por el asesor de la
Secretaría de Hacienda y Crédito Pública (SHCP), Hugo Garduño Arredondo, Marcos
Bucio Mújica destacó que, en el caso específico del sector agroalimentario, la
Reforma Laboral contribuye a una mejor atención del trabajo de los jornaleros
del campo; la Educativa, a garantizar la escuela de niños y jóvenes del sector
rural, y la de Telecomunicaciones a un mayor acceso a los sistemas de
información y comunicación.
Destacó que la Reforma Financiera
impulsa un nuevo esquema de financiamiento y créditos al campo, a tasas
preferenciales de un dígito y, en el caso de pequeños productores a una tasa
del siete por ciento, mientras que para las mujeres es de 6.5%, además de que
la garantía es su propia cosecha.
Agregó que la Reforma Energética
impulsará la producción de fertilizantes a precios accesibles, la minería
social y la contratación de Petróleos Mexicanos (PEMEX) de etanol producido con
excedentes de caña de azúcar.
Todas estas acciones, subrayó,
planeadas a corto, mediano y largo plazos darán mayor productividad y
competitividad al sector agroalimentario mexicano, y son acompañadas por
medidas como la reestructuración y reingeniería en la dependencia, el cambio en
las reglas de operación y la reorientación de programas, componentes y
recursos.
El asesor de la SHCP, Hugo
Garduño Arredondo, explicó que por instrucciones del Presidente Enrique Peña
Nieto, cada día se suman nuevas acciones para la aplicación de estas reformas
estructurales, y precisó que estas medidas, junto con la disciplina fiscal y el
manejo de la estructura macroeconómico, logran en gran parte contender los
efectos de la crisis de los precios del petróleo.
Ante estas circunstancias, dijo,
habrá que reconocer la oportunidad del impulso de estas reformas estructurales
para lograr mejores condiciones de crecimiento y desarrollo de México, sobre
todo en una etapa en donde se registra un débil crecimiento del Producto
Interno Bruto mundial.
Añadió que estos cambios
estructurales, significaron 58 modificaciones constitucionales y 81 cambios en
Leyes Secundarias, algo que no se había realizado en mucho tiempo, y que están
dirigidos a impulsar el crecimiento económico y la reducción dela pobreza en el
país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario